CAROL BURTON: “el diseño es un derecho”

Carol Burton reboza energía. Apenas atraviesa el ingreso a la Casa Central de Ferrocons, su presencia se hace notar. Su carisma y empatía solo oficiarán de “banda soporte” para dar lugar a un verdadero “show” de palabras y pensamiento crítico. Un llamado a la acción desde un lugar humilde pero de profundo análisis.

Mamá por dos, Burton es arquitecta. Vivió en España durante muchos años y fundó allí, junto a su marido, una empresa tecnológica que se posicionó entre las 5 mejores startaps europeas y que permitía, en tiempo real, optimizar el uso de recursos humanos y materiales orientado al ahorro de energía. Fue, además, coordinadora académica de maestrías y de un Instituto de arquitectura avanzada. De regreso en la Argentina, brindó múltiples asesorías compartiendo todo lo aprendido sobre ciudades y urbanismo y dictó la primer conferencia sobre Smart Cities en el país. Hoy construye y reforma con criterios claros de respeto del entorno y foco en la reconstrucción del paisaje y en la eficiencia “que responda a las estaciones de Córdoba, a sus heladas, a sus calores extremos y también a las necesidades reales y concretas de los clientes”, explica. Para tal fin los cuestionarios completos y exhaustivos de Carol ya son parte de su marca registrada.

Su paso por distintos espacios, fortaleció en Burton la convicción de aportar desde lo productivo y lo creativo. Incansable en la búsqueda de generar desde ese lugar, participó en importantes proyectos con foco en la innovación para revertir realidades sociales desatendidas y urgentes. MÍA: programa de acceso a la vivienda para mujeres “Mía nace tras un largo proceso de investigación y significó haber tomado conciencia de la existencia de un vacío (tanto desde lo público como desde lo privado) vinculado al acceso a la vivienda para las mujeres y también de lo deficiente de los programa de viviendas del Estado en relación a cuestiones de estética y en cuanto al impacto que el espacio, o el entorno construído, tiene en nuestra salud física y mental. La importancia de la luz natural, la ventilación, la posibilidad de pisar un pedacito de pasto o de disfrutar de un balconcito con flores son variables que nosotros tenemos incorporadas pero que el 50% de la construcción en nuestro país no la tiene” El programa apunta a la mujer como propietaria escriturada, no considera posibilidad de ampliación y no está pensado para zonas marginadas o periféricas sino lo contrario. La idea es que estén en el ejido urbano, donde puedan integrarse socialmente.

“Empecé a desarrollar un prototipo de vivienda que tenga iluminación y que sea segura ya que la mayoría de esas mujeres se va a trabajar y quedan niños que muchas veces deben vestirse solos, comer o irse al cole. Y también donde los espacios en los cuales pasa más tiempo estén pensados para que, desde allí, pueda ver a sus hijos. Hacer algo cómodo, útil y estético porque las mujeres somos cumplidoras: pagamos créditos, deudas ó préstamos en tiempo y forma por lo que tenemos que poder acceder a la vivienda.

Conceptos como lo íntimo, lo privado, lo público, no existen cuando vos tenés tu ropa guardada en una bolsa de consorcio debajo de lo que parece ser una cama, pero también es un sillón, pero también es camilla, pero que también es aguantadero y que abajo el piso no es piso, es tierra o un poco de cemento. Entonces ese concepto de vivienda es totalmente deficiente. Y esas carencias impactan en el desarrollo de una persona como ser cívico”

“Mi principio es que el diseño es un derecho. Que la estética y la belleza son un derecho. No por el hecho de que tengas más o menos tu casa tiene que ser fea o deplorable. La vivienda es un derecho humano”

“Al proyecto lo estoy llevando adelante sola y es agotador. Estoy en contacto con la Cámara de la Construcción y hay empresarios interesados en financiar el primer prototipo. Se haría con materiales secos, de 3 dormitorios, baño compartimentado, zona de lavadero americano y la cocina comedor. De acuerdo a la formación del grupo familiar de la mujer será el tamaño de la construcción. Después será el turno de ver con el INTA la posibilidad de generar una huerta o árboles frutales que generen independencia también desde este lugar.” “Los espacios públicos como espacios democratizadores” Para Carol, la recuperación de los espacios congregantes es una materia clave para pensar ciudades y sociedades que gocen de buena salud. “Hay un alcalde en Bogotá, Enrique Peñaloza, que a mí me encanta, que fue el que hizo el Transmilenio y él dice que el transporte público democratiza; porque una vez que subimos ahí, todos somos iguales. Te traslada de un lado a otro y funciona para todos. Sucede lo mismo con lugares como el Parque del Kempes o del Chateau, son espacios a los cuales vamos todos, que nos reúnen como sociedad y yo los celebro”

“Cuando vacías los espacios públicos, cuando invertís en autopistas antes que en ciclovías o en transporte público, das vuelta las prioridades. Vamos por la calle con miedo al que tenemos al lado porque nos hemos dejado de encontrar como sociedad en estos espacios que son sumamente necesarios para la construcción de una sociedad sana. ¿Dónde están el polideportivo o un buen sistema de ingreso a un estadio público, por ejemplo de fútbol, donde hay un orden y nos permiten a todos caminar hacia un evento en común que nos divierte a todos?”

Café con Arquitectos: transferencia de conocimientos Previo a la pandemia (y en stand by por la misma) Carol inició un ciclo con la finalidad de compartir con colegas experiencias útiles y conocimientos que le hubiese gustado recibir en diferentes etapas de su profesión. El formato era de charlas ejecutivas de 45 minutos.

“Armé Café con arquitectos como una experiencia piloto. Me propuse invitar a tomar un café a 6 personas para contarles, sin ninguna cuestión académica, cómo forjé mi carrera profesional. Desde el importantísimo rol de la comunicación en un estudio de arquitectura (y cuánto traje de ese mundo para forjar una marca que trasciende la obra construída) pasando por el marketing, el mailing, el branding , las finanzas, el proyecto, la relación con el cliente, la relación con los proveedores. La obra y la comunicación como ejercicio de la profesión, es decir el valor de los planos y del dibujo técnico como nuestra forma de hablar con otros profesionales. La rigurosidad para que otro pueda entender lo que le estás pidiendo y acortar plazos, minimizar errores, costos, materiales, gestionar mejor los tiempos, el presupuesto, todo. Cuando hay documentación clara, precisa, los proyectos andan solos”

Los 3 ciclos completados fueron un verdadero éxito y hasta sumaron sponsors convencidos del valor de la propuesta. De 6 personas pasaron a 18 (cupo máximo que aceptó Carol para no perder lo “íntimo” de la propuesta) de diferentes edades, mujeres en su mayoría y que llegaron a Café con Arquitectos con diferentes inquietudes y encontraron allí un valioso espacio de transferencia de conocimientos, despojado de egos, que no paran de recomendar.

Próximo desafío: LAB (Latinoamérica Bureau) Como primicia, Carol contó a Ferrocons su próximo y ansiado desafío. “Va a ser un espacio de workshops, talleres, lecturas y de distribución de conocimientos donde se van a hablar temas específicamente relacionados a la arquitectura pero pertinentes al calentamiento global y al impacto que la construcción tiene sobre el planeta”, explica una Carol entusiasta y de sonrisa generosa. Se trata de trabajos bimestrales con entrevistas, podcasts a referentes latinoamericanos “y todos los vínculos y las posibilidades de desarrollar una forma construir y de vincularnos con el planeta que nos lleve a un lugar mejor que el que estamos en este momento”. Ya tenemos la parte gráfica aprobada y los primeros entrevistados y la idea es generar una red de vinculación que genere sinergia entre los diferentes actores. ¡Venimos trabajando en esto y estoy super ilusionada!”

Comprometida, inteligente y portadora de una contagiosa sensibilidad social, así fue el paso de Carol Burton por Ferrocons.

Carolina Samamé para Ferrocons